
Fotografía en Corredor de los Volcanes, Perú.
Es como recorrer un camino largo y difícil en un país desconocido.
De todos los innumerables pasos es solo el último el que le lleva a su destino.
Sin embargo, usted no considerará todos los pasos anteriores como fracasos.
Cada uno de ellos le acercó más a su meta, aunque haya tenido que dar marcha atrás para sortear un obstáculo.
En realidad cada paso le lleva hacia su meta, debido a que estar siempre en movimiento, aprendiendo, descubriendo, encontrando, es su destino eterno.
Vivir es el único propósito de la vida.
El sí mismo no se identifica con el éxito o el fracaso —la idea misma de devenir esto o aquello es impensable.
El sí mismo comprende que el éxito y el fracaso son relativos y que están interconectados, que son la trama y la urdimbre misma de la vida.
Aprenda de ambos y vaya más allá. Si usted no ha aprendido, repita.